Pequeña biografía que te interese destacar:
Aunque desde que tengo uso de razón siempre me ha gustado escribir pequeñas historias, breves relatos sin más afán que el dar rienda suelta a mi imaginación, en 2005 uno de ellos se hizo mayor y se convirtió en la novela El Kali. A ella siguieron otras como Yo también te odio y Las glándulas de Bartholin, todo ello entrelazado con aventuras como la de improvisado divulgador literario o participante en la puesta en marcha y organización del Certamen Bilbao Aste Nagusia entre 2013 y 2020.
¿Cómo definirías en un máximo de cinco líneas de qué trata tu libro y por qué deben comprarlo los lectores?
Dos seres aparentemente distantes, un sacerdote implicado en un caso de pederastia y una famosa reportera del corazón, confluyen de manera inesperada tras el crimen de una persona muy cercana a ambos. Una joven subinspectora, tutelada por un inspector de épocas más grises, será la encargada de averiguar la autoría del crimen tras sumergirse en una investigación llena de giros inesperados.
¿Cuál es el principal objetivo que te planteaste con la escritura de esta obra?
El reto era el de desarrollar una historia completa en formato compacto, asequible en su lenguaje para quienes no son lectores empedernidos. A ellos es a quienes hay que ganar para la causa literaria.
¿Qué es para ti ser escritor/a? ¿Te cuesta utilizar esa palabra para definirte?
Ser escritor genera un cúmulo de sensaciones donde tienen cabida la creatividad, la frustración, el afán de superación, la felicidad ante la obra concluida, la constancia… Me cuesta definirme como escritor, porque tengo la suerte de conocer a un montón de personas con una gran trayectoria literaria,y me siento insignificante frente a su labor y fecundidad.
¿Qué ha sido lo más bonito y lo más difícil de todo el proceso de publicación de tu libro?
Lo más bonito es que la idea y la trama completa surgieron en mi cabeza y me exigieron plasmarlas en papel, pero colaboraron tanto que el proceso fue breve y gratificante. Lo más difícil para mí era todo lo relacionado con el marketing, como la selección de la portada y el resto de detalles no literarios, pero tenía la suerte de contar con el equipo de Rubric.
¿Les aconsejarías a otros escritores que se embarcaran en la aventura de la autoedición?
Sí, y lo digo desde la experiencia de otros formatos de edición. Es una opción que no debe descartarse.
¿Cuál ha sido tu experiencia con Rubric?
Muy positiva, confirmando que me encontraba ante un equipo experimentado a la hora de ir avanzando en cada paso del proceso. Esto es algo fundamental a la hora de depositar tu confianza en quienes van a llevar a cabo la publicación.
¿Qué sentiste cuando tuviste el libro entre tus manos?
La satisfacción de ver la obra concluida, de que ha llegado el momento de que deje de formar parte de mí para ser parte de quienes la lean.
¿Algún consejo para escritores que están empezando?
Esta es una vocación ingrata para quienes buscan logros inmediatos, pero sabe compensar con el paso del tiempo.
Algo que desees añadir…
Es imprescindible leer mucho antes de tomar la decisión de escribir, y no dejar de leer cuando se escriba. La escritura requiere de un aprendizaje infinito.
Últimamente nos gusta cerrar nuestras entrevistas con una pequeña batería de frases que requieren una respuesta muy breve, ¡vamos a ello!
Tu principal fuente de inspiración es… el mundo que me rodea.
Para llamar a las musas nada como… ponerte a manos a la obra.
Tu lugar preferido para escribir… mi pequeño estudio.
¿Prefieres el día o la noche?, ¿el silencio o algún sonido de fondo? Noche y silencio.
¿Libro electrónico o libro en papel? En papel.
¿Alguna superstición? Afortunadamente no.
Un sueño como escritor/a… sentir la presión del folio en blanco.
Tu escritor/a favorito/a… Eduardo Mendoza
Un personaje literario que te cautivara especialmente… El detective Philip Marlowe
La novela que te hizo llorar… La cabaña del tío Tom
Por último, nos gustaría conocerte un poquito mejor, ¿te animas a responder a nuestro apartado “muy personal”?
Tu comida favorita es… bacalao al pil-pil
Serías capaz de insultar si… pierdo la paciencia
Tu ciudad favorita es… Venecia
Lo que te hace más feliz… un día festivo
Lo que más odias de este mundo… los madrugones
Una manía personal… llegar a tiempo a todas partes
¿De qué te disfrazarías en una fiesta de disfraces?... de lo que toque ese día
Ahora mismo estás leyendo... 22-11-63, de Stephen King
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