Cinco errores al autoeditar tu libro
Acabas de dar por finalizada la creación de tu libro. Ya solo queda hacerlo accesible para todos y empiezas a plantearte la autoedición como el mejor camino. Bien por ti, porque estás en lo cierto. Pero, ojo, hay cinco errores que puedes cometer al autoeditar tu libro por tu cuenta. Te los indicamos ahora.
1. Autoedición amateur versus profesional
El primer error es, sin duda, que no podrás evitar que tu libro desprenda esa sensación de amateur y que llegará a tu lector. No es difícil distinguir una versión profesional de una más casera. Se notará en muchos matices que acabarán dejando a tu obra como «poco cuidada», por mucho empeño que hayas puesto. Esto está detrás de muchos libros que fracasan.
Hay que tener mucho cuidado, ya que todo lo que parece poco profesional no resulta atractivo. Si se encuentran errores en el producto en general, se corre el riesgo de hacer sentir al lector que va a pagar por un artículo de poca calidad. Es una pena que un texto magnífico se vea devaluado por componentes técnicos.
2. Que no se entienda el contenido del libro o sea legible
Si el texto no se encuentra bien estructurado o no se entiende bien, el trabajo de creación no habrá servido para nada. El lector no recibirá la información correctamente como para asimilarla. Tú, como creador, lo tienes claro. Pero debes comprobar que tus lectores entenderán tus expresiones, tus recursos, o que comprenderán tu idea. En las editoriales serias como Rubric contamos con un servicio de corrección profesional de textos para evitar decepciones en el lector.
Un libro con una maquetación inadecuada nos lleva a distracciones. Un mal diseño de portada puede llevar a confusión en cuanto a su género literario. Los errores en el texto harán que cueste seguir el estilo narrativo. Todas estas situaciones provocan que la lectura quede abandonada y el trabajo en el olvido.
3. Tomar malas decisiones en un sector —el editorial— desconocido
No se puede saber de todo. Hay una gran diferencia entre la parte creativa de escribir un libro y la parte más técnica de maquetación, edición, diseño o valoración. No solo hablamos de conocimientos, sino también de experiencia. Una autoedición con decisiones tomadas a la ligera o sin sentido puede arruinar la obra.
Piensa, por ejemplo, en la colocación de tu obra en las estanterías. Algunas librerías virtuales son de libre disposición, pero hay que saber usarlas para extraer todos sus beneficios. Colocar una versión impresa, si no lo haces tú mismo (con el coste que conlleva) puede resultar prácticamente imposible. La impresión bajo demanda de Rubric lo soluciona.
Para evitar las decisiones equivocadas, en la agencia de servicios editoriales Rubric ponemos a tu disposición a un asesor personalizado. Te aconsejará acerca de todas las opciones que tienes para elegir, siempre dentro de tus posibilidades.
4. Restar importancia al exterior y usar un diseño de portada aficionado
A la hora de buscar un diseño, y para abaratar costes en algo que se puede considerar secundario, se suele tirar de tópicos. El resultado es que tu libro será uno de tantos que siguen la estela de otros. Otro error es terminar encargando un diseño aficionado.
Una mal diseño de portada hará que tu libro sea rechazado. Y no te engañes: esto ocurre tanto en ebook como en papel. ¿Por qué? Porque será su visibilidad en la librería lo que moverá a un lector a decantarse por comprar un ejemplar de tu obra, en vez de por otro libro. Cuida la imagen. Es fundamental.
Lamentablemente, una portada desafortunada puede anular todas tus posibilidades. Si el diseño no es el adecuado, el librero puede que no sepa dónde colocarlo. Y lo que es peor, esconderlo y no recomendarlo.
5. Autopublicar sin una mirada crítica externa
En esta cuestión tenemos dos errores en uno. Por un lado, existe el riesgo de que nadie más haya leído tu libro (o que lo hayan hecho personas de confianza no profesionales). El resultado es que posiblemente se hayan quedado sin corregir erratas, frases incomprensibles o fallos de estilo. O que te den una valoración benigna para no ofenderte.
Por otro lado, sin un informe de lectura nos estaremos lanzando al mercado «a lo loco», sin saber si tenemos posibilidades comerciales, errores respecto a la narración, etc. Una mirada externa, crítica y experimentada supone ir guiados por un nuevo camino, con la tranquilidad de conocer la calidad de tu obra y disponer de consejos para mejorarla.
Como podrás comprobar, estas indicaciones son errores en los que es fácil caer. Las prisas, el restar importancia a aspectos claves o el simple desconocimiento del sector editorial pueden echar por tierra un arduo trabajo. O dejarlo en un cajón. Pero eso jamás.
Déjate guiar por profesionales que hagan más fáciles esas tareas técnicas que dejarán tu libro perfecto. Además, estará posicionado y disponible para tus lectores. Confía en los expertos, confía en Rubric. ¡No lo dudes y contacta con nosotros!
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