Cómo publicar un libro y tener éxito
Cómo publicar un libro y conseguir que tenga éxito. Esa es la gran duda que todo escritor independiente tiene cuando acaba de terminar una obra, sobre todo si es la primera. Para resolver esta incógnita, hemos de tener en cuenta las siguientes etapas:
Caminos para editar un libro
La escritura
El éxito de tu libro depende de dos fases de trabajo que son imprescindibles. La primera es la escritura de tu obra, para que la debes tener en cuenta tres consejos importantes:
- Escribe lo que deseas sin condicionarte y sin pensar en posibles lectores, escribe el libro que a ti te gustaría leer y disfrutar.
- No te condiciones por tiempos o plazos ni tengas prisas. Tu libro es uno y único, debe quedar lo mejor posible.
- Cuida el contenido y la redacción. Piensa en la posibilidad de recurrir a un profesor de escritura, asesor literario o un corrector, en caso de que lo creas necesario.
La publicación
Una vez que has terminado el libro, la segunda fase es que llegue a los lectores, para lo que dispones de cinco caminos principales.
- Los certámenes. Es un camino válido, pero te vas a encontrar siempre mucha competencia; sobre todo cuanto más prestigioso sea el premio literario. Es un buen camino para los autores noveles y desconocidos, que pueden ver reconocido su buen trabajo. En contrapartida, lo negativo es que normalmente hay que esperar mucho tiempo a la decisión del jurado. Y otro aspecto que suele desanimar es la ausencia de noticias si no se ha ganado y desconocer la valoración que ha hecho el jurado de nuestra obra. La tendencia es pensar que, si no ha ganado, no ha gustado. Eso no es así, no sabemos si la obra ha quedado segunda y a punto de ganar, o que haya gustado muchísimo. A veces los jurados deciden por causas incluso extraliterarias: por el género, la temática, el ganador anterior, el resto de obras participantes…
- Las agencias literarias. Es un camino nada recomendable para un autor novel, aunque pueda parecer contradictorio. Estas agencias han cambiado mucho y ahora se dedican a buscar autores que ya cuentan con un cierto nombre, para intentar aprovecharse de sus trayectorias. Algunas cobran por informes de lectura, pero eso no garantiza que vayan a representarte. Las buenas agencias son aquellas que actúan como “cazatalentos” y que solo cobran por porcentaje de ventas de sus representados, pero cada vez son menos.
- La edición tradicional. Es a lo que la mayoría de autores aspira, tanto noveles como ya consagrados. Los primeros para introducirse y los segundos para mantenerse o dar el salto a editoriales con más nombre. El problema principal que se nos plantea es que prácticamente todas dicen estar saturadas y no admiten manuscritos o establecen plazos concretos para la recepción de los mismos. Aunque logremos enviar nuestro libro, pocas responden y la espera se convierte en una incertidumbre. Y después pasa como con las agencias, que no arriesgan y buscan también nombres conocidos, con lo que al final es una espera estéril para aquellos autores noveles o que tienen ya editada alguna obra. También está ocurriendo que muchas editoriales tradicionales, incluso muchas de las más famosas, ofrecen autoedición; pero, cuidado, lo hacen a precios abusivos y pretenden hacer creer a los autores que su marca los va a encumbrar, cuando no es así. Al final, se paga un precio muy alto a cambio de recibir un número de libros, y a un coste que hace difícil siquiera recuperar la inversión.
- Coedición. Es quizá la fórmula más engañosa. Prácticamente no hay ninguna editorial que ofrezca este sistema y que realmente se trate de una verdadera coedición. El coste suele ser mayor y pierde muchas de las ventajas de una autoedición: por ejemplo, el autor acaba pagando la publicación, encima reparte beneficios y no tiene tanto control ni participación sobre el proceso. También proponen grandes ofertas de distribución, ventas, eventos y ayudas, que después no existen.
- Autoedición. En la actualidad, si se hace bien, es probablemente el mejor camino hacia el inicio del éxito para muchos autores noveles. La principal ventaja es que el autor apuesta por su obra y no está sometido a esperas, plazos, decisión de un jurado o del comité lector de una editorial o una agencia (si no nos cobran encima por ello, claro). La autoedición de libros en un medio para abrirse paso al mundo editorial ya con una experiencia en publicar, e incluso poder ofrecer con el tiempo unas garantías a una editorial tradicional de renombre. Hay muchos casos de autores que comenzaron autopublicándose y que después han dado ese salto, en muchas ocasiones imprescindible para ser un poco más conocido y quitarle ese “miedo” al riesgo que tienen las “grandes” editoriales. Por ejemplo, la escritora cántabra Edurne Cadelo comenzó autoeditando sus novelas con nosotros, siguiendo nuestros consejos hasta que, finalmente, la prestigiosa editorial Espasa, del Grupo Planeta, la fichó.
Autopublicar un libro es una decisión que en primer lugar nos quita esa ansiedad y esa premura por ver hecho realidad nuestro sueño, y que te permite cumplir la ilusión sin estar condicionado a terceros (agencias, certámenes y editoriales tradicionales).
Entre las editoriales que se dedican a la autoedición, e incluso entre las que se hacen pasar por tradicionales, desconfía de las que insisten desde el primer momento en que no vas a tener que pagar nada. Esa es la forma de atraer, y después aparecen requisitos como tener que contratar algunos servicios, tener que vender obligatoriamente un número de libros, asegurar un número de asistentes a las presentaciones que los mismos autores deben organizar, quedarse con tus derechos de autor, etcétera.
La principal ventaja de la autoedición es que eres libre, y así debe ser en todos los casos. Vas a distinguir una buena editorial de autoedición en primer lugar por el asesoramiento. Desconfía de las que tienen mucha prisa y responden a tus preguntas y dudas con respuestas ambiguas, muy breves o incluso poco claras. Hay algunas que hasta parecen enfadarse si se les pregunta mucho. Otras incluso prohíben compartir cualquier documento de comunicación, lo cual es como si nos dan un documento legal y no permiten que se lo consultemos con un abogado. Suena muy extraño, ¿verdad?
Incluso, después de hablarlo claro, una buena editorial nos enviará un contrato en donde se exponen todas las condiciones. Un contrato siempre tiene derechos y obligaciones, por ambas partes. Una de las cuestiones importantes es la de los derechos de autor. En una autoedición no hay cesión de derechos a favor de la editorial durante un largo tiempo, ni tampoco se ceden los derechos derivados a terceros, como puedan ser traducciones, mercadotecnia, paso a audiovisuales… Solo existe una cesión y permiso en lo que se refiere a la publicación del libro en tiempo y plazo que se determine para esa edición, y siempre respetando lo que indica la Ley de Propiedad Intelectual. Por ejemplo, un autor no puede ceder de por vida o por tiempo ilimitado los derechos de su obra, porque ya esa Ley impone un máximo de 15 años. También hemos de desconfiar cuando se indica la cesión de derechos para todos los países del mundo y en todas las lenguas y traducciones. Cuando veas esto en un contrato de autoedición, e incluso de edición, ponte alerta porque tus derechos van a estar amenazados.
El éxito de tu publicación va a depender de una buena conexión con la persona que te asesore, y debes buscar que lo haga sin exageraciones, con conocimiento de su oficio y sin promesas ni certezas incuestionables. Si tu libro es bueno, se va a poder vender bien y va a tener éxito, pero eso nadie te lo puede ofrecer sin apenas haberlo leído, como a veces ocurre.
Otra característica fiable de una buena editorial de autoedición es que se interese por el contenido, sobre todo en la forma. Para que tenga éxito, un libro deber estar bien redactado y, sobre todo, no tener faltas y estar cuidado en todos sus detalles. Si una editorial no se preocupa de la calidad, tanto interior como exterior, malo, porque es importante mirar a corto, medio y largo plazo. A corto para obtener una buena edición, a medio para que el libro sea conocido y llegue a los lectores, y a largo para que el autor se vaya haciendo un nombre asociado a lecturas que gustan, bien cuidadas, bien editadas, y que van a suponer abrir camino al éxito para las futuras obras. Está en juego tu imagen como autor, y una buena imagen ayuda a conseguir lectores y prestigio.
Rubric piensa en tu libro y piensa también en ti. El éxito de tu obra es un éxito también nuestro y nos permitirá seguir emprendiendo proyectos juntos. Nada nos enorgullece más que con el tiempo nuestros autores puedan dar el salto a editoriales tradicionales, que sean conocidos y lleguen a ser, por qué no, superventas. El camino del éxito siempre empieza por un primer paso, y en él queremos acompañarte.
Contáctanos. Será una de las mejores decisiones que tomes en tu vida.
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